miércoles, 19 de diciembre de 2012

14.

+ Yo te prometo un para siempre, ¿tú me lo prometes?
- No lo sé, eso es demasiado tiempo, todo puede cambiar y podemos acabar odiándonos.
+ Bueno, aunque te odie, si me necesitas ahí estaré.
- No lo creo... si me odias no me querrás ni ver...
+ Pues cierro los ojos.
- Tampoco me querrás oír.
+ Pues no te dejaré que hables...
- ¿Entonces?
+ Te abrazaré y te diré... ¿Te acuerdas de aquella tarde que te prometí un para siempre? HABLABA ENSERIO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario